Arte con fotografías pueden conjugarse en nuestras cámara digitales para conseguir estupendas imágenes de paisajes. Descubra todo lo que puede conseguir.
Casi todo el mundo ha hecho alguna vez una fotografía a un paisaje para hacer arte con fotografías. Las características técnicas no suelen presentar grandes dificultades, ya que normalmente se hacen de día, con gran profundidad de campo y a una velocidad de obturación alta. Lo difícil en este tipo de imágenes es saber mirar y lograr captar el punto de interés.
Un paisaje puede tener muchos elementos que lo convierten en agradable a la vista, como lagos, montañas, flores…, pero al apretar el disparador la imagen pierde su belleza porque el espectador no sabe dónde mirar entre tantos motivos. Es recomendable jugar con las normas establecidas, los colores y las formas para encontrar el punto fuerte de cada fotografía.
Arte con fotografías – Menos es más
Algunas de las imágenes de paisaje más impactantes son las más sencillas. El vacío o el espacio negativo como tema principal es difícil de encontrar pero puede dar grandes fotos. La web The Photo Argus recomienda aprovechar los días de niebla o nieve para este tipo de acercamiento porque “aportan un lienzo en blanco perfecto para decidir dónde situar el punto focal”.
Otro elemento útil a la hora de componer un paisaje son las líneas. Las líneas marcadas atraerán y dirigirán la mirada del observador a través de la imagen hacia un punto de fuga o pueden formar patrones que constituyan la propia escena.
Una de las reglas más sencillas para situar el horizonte es la de los dos tercios, que recomienda evitar la simetría y aportar mayor espacio al suelo o al cielo según el efecto que se busque en lugar de dividir la imagen por la mitad.
La iluminación y la temperatura
El color y la luz pueden marcar la diferencia entre un paisaje normal y uno interesante. Tanto el tono del cielo, como la hora, como un motivo de un color específico en la imagen pueden ser el elemento que aporte genialidad a una imagen consiguiendo fotos artísticas.
A primera y última hora del día la luz incide lateralmente, por lo que las formas del paisaje ganan en volumen y las texturas son más evidentes. Además, la temperatura de color variará a lo largo del día, siendo más cálida a primera hora, más neutra a mediodía y azulada en la hora previa al anochecer. La elevada temperatura de color en la playa y la alta montaña hará que estas escenas también tengan una dominante azulada.
Un pequeño truco a la hora de medir la exposición en imágenes con grandes contrastes es centrarse en las zonas más oscuras, porque la información resulta más fácil de recuperar que en las zonas sobre expuestas.
La técnica HDR para hacer arte con fotografías
La fotografía de paisaje no necesita muchos materiales que cualquier aficionado a la fotografía no tenga ya probablemente en su equipo. Un objetivo gran angular, un trípode para las escenas con menos luz y un filtro polarizador para la situación opuesta son elementos suficientes para empezar a disparar.
Otro recurso que ofrece resultados impactantes a la hora del procesado la técnica High Dinamic Range o HDR, que consiste en hacer varias tomas de la misma escena con distintas exposiciones para después unirlas con un programa y abarcar el mayor rango de niveles de exposición posible en las distintas zonas de la imagen. Esta técnica permitirá una imagen con exposiciones perfectas incluso en casos de grandes contrastes. La web DZoom recomienda el software PhotomatixoArtizen HDR.
Inspirarse en el contexto para hacer arte con fotografías
Una foto de una bonita puesta de sol puede convertirse en una instantánea única añadiendo otros puntos de interés más cercanos que sirvan para componer la imagen. Poner el primer plano un insecto a contraluz, por ejemplo, mantendrá la belleza de la escena, pero añadirá contexto e interés al disparo.
Para inspirarse, no es necesario encontrarse en las rocosas o en un fascinante paisaje, sino buscar la mejor oportunidad en lo que se conoce. Los alrededores de nuestra propia casa, un parque o una zona urbana pueden ser buenos lugares para entrenar la creatividad a la hora de enfocar y componer. Una vez que se dominen estos elementos, cualquier escenario podrá ser objeto de buenas fotografías.
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